Cuenta atrás para la puesta en marcha de la Zona Única de Pagos en Euros (SEPA): faltan 10 dias para su implantación definitiva.

SEPA mejora la eficiencia de los pagos en Europa mediante el desarrollo de instrumentos, estándares y reglas comunes y afecta tanto a ciudadanos como a empresas.

A partir del 1 de febrero de 2014, todas las transferencias y domiciliaciones bancarias se realizarán en los países miembros de la Unión Europea de acuerdo con las reglas de la Zona Única de Pagos en Euros (Single Euro Payments Area, SEPA), que de esa forma completará su implantación definitiva.

Desde ese momento, tal como establece el Reglamento UE 260/2012, sólo podrán realizarse aquellas operaciones que respeten las características técnicas y de negocio de los instrumentos SEPA, siendo, por tanto, necesario la adaptación de todos los usuarios en el plazo previsto.

Las nuevas normas de la Zona Única de Pagos en Euros afectarán también a la relación de las empresas y las Administraciones Públicas con las entidades bancarias, que deberán acomodar, entre otros aspectos, el manejo de sus órdenes de domiciliación, los datos a intercambiar en la cadena de pago o los formatos de inicio de sus órdenes de cobro y pago.